DE MENTIRITAS

Parece ser que el mentir se ha convertido en un "deporte nacional".

Este pecado que está enunciado en la Ley de Dios … en el presente se ha convertido en una peste.Existen mentiras, mentirotas y mentiritas, depende del asunto y la gravedad del mismo. Desde el … "dile que no estoy" … hasta el "Yo protegeré al pueblo" … No se miden y lo peor es que se nos esta haciendo adicción. Ya hasta uno dispuesto a decir mentiras y sobre todo a escuchar mentiras.

Las mentiras por diversión son un excelente negocio, más, si las acompañamos de palomitas. No hay duda de que un gran porcentaje del contenido de las películas que se exhiben hoy, son un teje de mentiras llevadas a la fantasía, por la imaginación.

Luego vienen las cotidianas … amaneces con resaca y te reportas enfermo; exageras el precio de tus tenis, o levantas falsos en tus críticas a tus conocidos …. Luego subes de tono, y mientes a tu familia, a tu esposo o esposa, a los amigos y a ti mismo.

¡Vivimos en un océano de mentiras! … políticas, económicos, sociales ... todo parece verdad, pero vivimos en una burbuja de mentiras.

Recuerden, queridos lectores, que el diablo es el "padre de la mentira" y si nos aferramos a ella, sólo le estamos haciendo el caldo gordo al demonio, con el peligroso riesgo de la condenación eterna … Si Dios manda no mentir, es por algo … ¡Él siempre tiene la razón!

Sin mentiras, viviríamos más confiados en Dios, y en los demás. No sospecharíamos de nadie y las relaciones serían prístinas, sin asomo de pecado.

Si le "mentimos" a Dios … ¡imagínense qué mentira no le diríamos al hermano! La mentira es un arma del infierno; ha acabado con hogares, fortunas y países completos han parecido por esta fea costumbre, de no decir la verdad.

Aléjense de la mentira, cuenten hasta diez, antes de pronunciarla … y vivan con la certeza de la verdad.

Dicen … "La verdad no peca, pero incomoda" … ¡pero es preferible incomodar al que sea, con tal de no incomodar a Dios! ¡En esta liga de mentiras comprometemos la eternidad!