GENTE DE ÉXITO
¡ GENTE DE ÉXITO !
Los exitosos son, por lo general, talentosos, creativos y trabajadores, con estudios universitarios, o unos genios si carecieron de ellos.
Estuvieron en el lugar correcto y a la hora correcta. Por lo general, tienen una enorme capacidad de oportunidad, pero muchos de ellos, desgraciadamente, están ligados al poder y la corrupción.
Es muy común que acallan sus escrúpulos morales porque muchos de sus gestiones son ilegales, pero se atreven, arriesgándolo todo. Son audaces y se lanza a los negocios sin temores.
A la larga, cuando ya son personas de éxito, su conciencia les reprocha sus acciones del pasado y tratan de ser honorables; crean fundaciones benéficas, fideicomisos y hacen muchas donaciones. Persiguen el reconocimiento social y su descendencia se cría entre sábanas de seda.
Algunos son austeros porque el éxito les llegó tarde, pero a la mayoría les llega en plena juventud; éstos son gastadores para rodearse de "amigos", que no son otra cosa que una fauna inseparable del que ha logrado el éxito. Se rodean de gente que les supera en pensamientos y conocimientos y forman parte de su séquito para ver cómo se conducen y que aprenden de ellos.
A los exitosos que les ha costado sangre, sudor y lágrimas, por lo general son muy moderados; exigen disciplina en su entorno familiar y les financian su educación... Éstos son los mejores herederos.
Los hijos que han tenido una vida fácil, comúnmente se pierden por falta de disciplina y acaban con la empresa familiar en la segunda generación. La mejor empresa es la que funciona sin el dueño, y tiene los candados necesarios para aspirar a más generaciones.
La mejor empresa de todas es la que ve a sus empleados y colaboradores como parte de la familia; los promueven y los impulsan a ser mejores. Éstos tendrán siempre puesta la camiseta y se les resbala la tentación de los buscadores de talentos... Éstos formarán junto a la empresa, una cadena de éxitos.
Acuérdate, persona de éxito: las mejores empresas son aquéllas que consideran que primero son sus colaboradores, empleados y sus familias, y los hacen sentir que son parte del éxito. Así llevarán con orgullo la camiseta, que estará tatuada en su ánimo por sentirse partícipes del éxito moral, social y económico.
SAPIENTIA LDI
EDITORIAL