INCIENSO, MIRRA Y ORO

Estos tres elementos son los tres regalos que ofrecieron los Sabios del Oriente o Santos Reyes al Niño Jesús después de su nacimiento, cuando vinieron a adorarlo, y a reconocer en el recién nacido a un Dios, un Hombre y un Rey.

Este testimonio de los Santos Reyes, que la tradición los han llamado: Melchor, Gaspar y Baltazar y que reposan en sus tumbas en la Catedral de Colonia, fue reconocer de parte del mundo conocido, al Dios Creador y Sostenedor de la vida, al Hombre que vino a sufrir la muerte en redención de los pecados de los hombres, y al Rey Universal de todas las naciones, al cual se le debe obediencia, amor y reverencia.

Éste es el significado de estos tres simbólicos regalos ... y que han pasado a la Historia, como premios, que, el 6 de enero los niños reciben y representan al Niño Dios por la inocencia de sus acciones.

En el caso, de la fiesta de los Santos Reyes o Epifanía, los niños reciben cariño, caramelos y dinero, como réplicas actuales de los tres regalos de los Reyes Magos al Niño Dios.

Eso fue hace 2022 años y en el presente, la forma de adorar a este Recién Nacido por los adultos (que nunca dejan de ser niños) durante todo el año es con el espíritu constante de oración (incienso). Tener siempre presente, la muerte que nos acecha y preparar el alma para tal ocasión (mirra) y las buenas obras, es decir, hacer la caridad entre los pobres y la caridad moral entre los que no carecen de nada (oro).

Tener presentes estos tres regalos que heredamos de los Reyes Magos y regalemos a todos el enorme tesoro de la caridad, la reverencia, el respeto y obediencia al Creador de todo y el arrepentimiento a la menor falta de cometida.

Es así, como los Reyes Magos han trascendido la Historia con su ejemplo, regalos y ... ¡Recordémosles con cariño este próximo 6 de enero!