Italia declara la gestación subrogada como delito universal

17.10.2024

El Senado italiano ha dado luz verde a la ley que convierte la gestación subrogada en un «delito universal», lo que permitirá castigar esta práctica aunque se realice en el extranjero. La normativa, impulsada por el partido de la primera ministra Giorgia Meloni, busca frenar lo que ha sido calificado por el Gobierno como una «práctica inhumana».

(Agencias/InfoCatólica) El Parlamento italiano aprobó definitivamente ayer miércoles el proyecto de ley que convierte la gestación subrogada en un «delito universal». La nueva normativa permite sancionar a los ciudadanos italianos que recurran a esta práctica fuera del país, con penas previstas de hasta dos años de cárcel y multas que oscilan entre los 600.000 y un millón de euros.

El proyecto de ley fue presentado por el partido de ultraderecha Hermanos de Italia, liderado por la primera ministra Giorgia Meloni, y fue aprobado en el Senado por 84 votos a favor y 58 en contra, después de recibir el visto bueno de la Cámara de Diputados en julio de 2023.

Desde 2004, la gestación subrogada, o «vientre de alquiler», ya estaba castigada en Italia, pero la nueva ley extiende su alcance más allá de las fronteras del país. Según el texto aprobado, la legislación vigente se aplicará también a los italianos que utilicen esta forma de gestación en el extranjero, lo que refuerza las restricciones contra esta práctica. Meloni ha defendido con firmeza esta ley, calificando la gestación subrogada como una «práctica inhumana».

La oposición, en contra

El debate ha suscitado fuertes críticas de la oposición. Alfredo Bazoli, portavoz del Partido Demócrata, consideró que la medida refleja «un paternalismo estatal que transforma a Italia en un juez ético» que atenta contra los principios del liberalismo. Además, señaló que la ley puede perjudicar las relaciones diplomáticas con países donde la gestación subrogada es legal, y planteó interrogantes sobre cómo se tratará a las personas con doble nacionalidad que recurran a esta práctica.

Desde otros sectores políticos, las críticas fueron igual de duras. Ilaria Cucchi, senadora del grupo Verdes e Izquierda, calificó la ley como «un acto de desmesurada inhumanidad» que afecta a los padres, en su mayoría heterosexuales, que optan por esta forma de gestación. Maria Domenica Castellone, del Movimiento 5 Estrellas (M5S), acusó al Gobierno de usar la prohibición como «propaganda a costa de personas y niños nacidos de un acto de amor».

Por su parte, Ivan Scalfarotto, portavoz de Italia Viva, advirtió que esta ley está «hecha para golpear a los padres» que han recurrido a la gestación subrogada, y que las verdaderas «víctimas colaterales» serán los hijos, cuya documentación de nacimiento será vista como «la prueba de un delito».

Apoyo de la coalición gobernante

A pesar de las críticas, la medida fue aprobada con el respaldo de los partidos de la coalición gubernamental, como Forza Italia y la Liga, que han apoyado la postura del Gobierno. El portavoz de la Liga, Massimiliano Romeo, subrayó que la maternidad subrogada «no es una cuestión de solidaridad». Domenica Spinelli, senadora de Hermanos de Italia, argumentó que la ley busca «desincentivar» esta práctica y que su objetivo es decir «no a la violencia contra las mujeres».

Consecuencias legales y desafíos futuros

Con la nueva ley en vigor, queda por definir el reconocimiento legal de los hijos nacidos mediante gestación subrogada que ya residen en Italia. El Gobierno de Meloni se ha enfrentado a tensiones con ayuntamientos como el de Milán, cuyo alcalde, Beppe Sala, ha registrado a hijos de parejas homosexuales, amparándose en un «vacío legislativo».

En diciembre de 2022, el Tribunal Supremo de Italia dictaminó que los hijos nacidos por gestación subrogada deben ser reconocidos a través de un proceso de adopción y con la aprobación de un juez. Este fallo complica aún más la situación de las familias afectadas por la nueva legislación. 

Fuente: https://www.infocatolica.com/?t=noticia&cod=50695