LOS PELIGROS DE LA MATERNIDAD SUBROGADA
Son tantas ilusiones y planes que giran alrededor de una pareja recién casada: viajar, salir de fiesta, a conciertos, cocinar y hacer ejercicio juntos, comprar una casa, etc. … ¿Y los hijos? "Éstos se planean para cuando ya se hayan adaptado o hayan disfrutado de su tiempo en pareja". Esta última frase refleja la opinión de la mayoría y en las últimas décadas, desgraciadamente común en México. Según los datos estadísticos del INEGI, en 2022, la edad promedio para casarse fue de 34 años para los hombres y 31 años para las mujeres.
¡Imagina! … Tres o cuatro años de espera para ser padres primerizos, "en lo que se adaptan" … todo se complica, porque, biológicamente, ya pasó la época donde el cuerpo tiene las condiciones óptimas para quedar embarazada fácilmente.
¿Qué pasa cuando esto no sucede? … Se empiezan a contemplar otras opciones. Esto mismo les pasa a las personas de edad avanzada que prefirieron seguir solteras y se les pasó su tiempo para procrear y que desean todavía ser padres, o bien, las "parejas homosexuales", que por obvias razones no pueden concebir. Utilizan tratamientos de fertilización en algunos casos, la adopción y los vientres de alquiler o la maternidad subrogada. Esta última, es considerada una práctica pólemica por las implicaciones morales que tienen:
Considerar a la maternidad como un medio para generar economía, pone a la madre gestante en una terrible posición, vista como una incubadora humana, es decir, como si fuera una cosa.
En cuanto al bebé, si éste no nace como lo tenía idealizado la pareja, pueden ya no quererlo. Ha habido casos documentados, donde la pareja prefiere que se aborte, porque durante el embarazo al bebé se le ha detectado alguna anomalía en su estado de salud.
El vínculo que se desarrolla entre la madre y el bebé, es algo que no se puede disolver, por eso, aquellas mujeres que ofrecen su vientre en alquiler, viven con el recuerdo de su hijo, algunas como algo bonito, pero en la mayoría de los casos con remordimiento de conciencia.
La vida, al ser el don más preciado del ser humano, no se puede negociar bajo cláusulas como si fuera un comercio, una propiedad, y mucho menos disponer y celebrar acuerdos al respecto.
Para aquéllos que su paternidad y maternidad se ha visto frustrada, recordemos que hay muchos niños con esperanza de tener por fin una verdadera familia, simplemente, en 2022 conforme a los datos estadísticos del INEGI, hay más de 30 mil niñas, niños y adolescentes en casas hogar en espera de ser adoptados.
Lo preocupante de la maternidad subrogada, es que se piense que concebir a un bebé, ya no es producto de la unión entre dos almas que se aman y que desean trascender mediante los hijos, sino, producto de un deseo, como alguien que quiere algo y lo manda hacer. Tan es así, que vemos en países como Inglaterra, que esto va en aumento; hay una tendencia en hombres solteros de 50 años.
¿Será conveniente para el bebé tener un papá de esa edad? … ¿Que sea privado de la figura materna? … o … ¿Qué sea criado con la comunidad LGTBQ+?
¡Recordemos que el ser humano está hecho a imagen y semejanza de Dios! … Por eso, es tal su dignidad que no puede ser negociada!