ODIO A LOS HIJOS Y AMOR A LOS PERROS

20.01.2025

En lo personal, yo quiero a los animales. He tenido perros, gatos, tejones, patos y gallinas; pero nunca los quise, ni remotamente, como se quiere a un hijo. Hay una distancia tan grande en estos dos amores, que no puede haber comparación.

En la actualidad, nadie quiere tener a niños "odiosos" que "moquean y exigen atención". Por el contrario, los perros y gatos porque están de moda y a la moda, tan es así, que salen a pasear para presumir sus peinados de salón que son famosos en Facebook.

Pero… ¿por qué animales y no niños? … Es fatal ver en los centros comerciales a señoras con carriolas paseando a sus perros y gatos, pero no los acompaña ningún niño; hasta los establecimientos comerciales permiten la entrada de estas mascotas.

Este cambio de amor a perros en vez de niños no se entiende, si no examinamos los actuales valores sociales. El hombre y la mujer se han vuelto admiradores de sí mismos y si pasean con perros y gatos, es para tener tema de conversación entre amigos y lucir su estatus ante los demás.

Esta realidad me ha llevado a considerar que no hay compromiso con la responsabilidad, aunque atender perros y gatos es exigente, no se compara con un niño con alma donde compartes el mismo Padre celestial.

Tal parece que esto, que pasa con los niños, es una renuncia a la carga genética de tus ancestros y así, el linaje desaparece sobre la faz de la tierra.

En la esfera espiritual… ¿cuáles van a ser tus méritos? … Cuando renunciaste a ser padre por comodidad, por miedo al compromiso y evitar lazos a largo plazo … serás juzgado, sin duda, pero los hijos son, la mayoría de las veces, nuestras tablas de salvación.