Cualidades versus Virtudes

              LA VALENTÍA Y EL CORAJE

"La Valentía es la actitud y determinación con la cual un individuo hace frente y responde ante una situación de peligro, miedo o riesgo. Es además una virtud del ser humano que lo impulsa a ejecutar una acción a pesar del miedo y temor por las dificultades y riesgos a sobrepasar".

A esta cualidad humana, definida como fuerza de voluntad para superar ciertos impedimentos, sin miedo al fracaso, realizando gestas de valor, se le llama Coraje, y muchos la utilizan como sinónimo de Valentía.

En el mundo occidental, esta Valentía no surge de la confianza en uno mismo. Nos referimos a la Valentía Cristiana que surge del fondo del Evangelio, cuando Cristo N. S. nos invita a "no tener miedo", a confiar y lanzarnos a difundir Su mensaje desde las terrazas.

El mundo ha odiado y odia a quienes formamos parte de la Iglesia Católica, a quienes seguimos a El Maestro, a quienes acogen Su Evangelio de Justicia, de Paz y Misericordia.

Por eso, ante la confusión deliberada ante las modas paganas, ante amenazas e insultos, incluso ante agresiones y cárceles, los católicos contamos con un "plus" que viene de Cristo y que te alienta a llegar al heroísmo.

Ante la perspectiva actual, en la cual los enemigos se han diseminado por toda la sociedad, y nos tratan y acusan de "crímenes de odio", de discriminación y de querer limitar la libertad de otros, requerimos fortalecer nuestra Valentía y Coraje cristianos.

Las nuevas ideologías que promueven el aborto y la más aberrante de las perversiones sociales para descristianizar a las naciones, son y serán los que persiguen a los que sostenemos que la vida debe respetarse desde su concepción; que el hombre y la mujer son los dos géneros que Dios formó para que la humanidad pudiera cumplir con el "Creced y Multiplicaos"; que las tradiciones y costumbres de los pueblos son los que nos identifican como nación y no una masa universal de obedientes a los mandatos de una "sola humanidad".

Las fronteras deben protegerse al igual que la mente de los niños, de la influencia globalista que quiere destruir a la familia. Ante este panorama, debemos tener el Coraje de ser valientes para defender los principios éticos que surgen de las divinas Palabras del Evangelio, que nos impulsan a ser valientes para defender y poner en práctica los principios morales del mandato supremo del Sinaí.

Valor y Coraje, ante la persecución; Valor y Coraje, ante los retos de la vida cotidiana. La familia, el trabajo y sobre todo los retos éticos que nos presentan las nuevas filosofías.

Habrá, como ha habido en el pasado, momentos de debilidad, pero la verdadera Audacia se mide más por las cosas pequeñas, por la fidelidad a un serio compromiso diario, como dijo Francois de La Roche Foucald: "La auténtica Valentía es hacer, sin testigo alguno, lo que haríamos ante los demás sólo para que nos admirasen".

SAPIENTIA LDI

EDITORIAL