LÁGRIMAS DEL CIELO

La Santísima Virgen María, que nos mira desde el Cielo, baja repetidamente a manifestarse a sus hijos, para enviar mensajes de esperanza y castigo. ¿Qué sentirá la Virgen María al ver cómo se matan sus hijos? y ¿cómo matan sus hijos a sus hijos?

Ese maléfico crimen del aborto … ¡es la gota que está colmando el cáliz de la ira de Dios!

Imagina cómo está el corazón de María Santísima, al ver que la herencia que recibió al pie de la Cruz es derrochada por la falta de fe, la ambición y la gloria terrena que sólo satisface al ego crecido por el pecado. Cada cristiano que se le nubla el entendimiento y cae en garras del demonio … ¡es un dolor intenso en su Corazón Inmaculado!

¡Mira cristiano! … Dios no juega con la obra de sus manos, al contrario, le ha dado tantos talentos y capacidades a sus hijos para que dominen al mundo natural y transformen la naturaleza para su bienestar, que es un desatino, brincamos sus leyes y decretos. Él hizo el sol, la luna, las estrellas y es inmenso universo, todo lo hizo con un fin, donde sus hijos participaran de su grandeza.

Ese universo y ese Cielo, fue el gran misterio que nos comunicará en la Gloria pero, en este mundo, todo se revela a sus mandatos … ¡El peor crimen es no es no dar la oportunidad para que una nueva alma, conozca a Dios!

Los crímenes y pecados son infinitos, sus leyes pisoteadas … ¿Crees que tendrán piedad de los impíos? Así que, prepárate; tarde que temprano estarás en su presencia y ¿qué cuentas vas a dar? ¡No arriesgues tu vida eterna por una ideología que te aparta de Su presencia! … Reacciona, el hombre es nada; sin Dios, ni siquiera polvo, si no lo tienes en cuenta. Total, todos vamos a morir … ¡Aguántate! … la vida es un suspiro y el Cielo, un gran tiempo, sin el tiempo.

Mejor ponte de rodillas, pide perdón por tus pecados, y, el Dios del universo que ha formado las estrellas y las flores, te perdonará, para que al final te unas a Él, en un gran coro que cantará sus alabanzas en el Cielo, mitigando el dolor y las lágrimas de la Madre, la que más nos quiere y que intercede continuamente por nosotros. Dale un gran regalo a la Santísima Virgen María … ¡No abortes a tu hijo!