MADAME ROLAND
MADAME ROLAND
La flojera mental, predispone a que otros piensen por ti. Es muy fácil endosar tu libertad para que otros la defiendan por ti. Es el fenómeno de los partidos políticos y los ideólogos; dejar a otros para que carguen con la responsabilidad de tu futuro.
Una cosa es recoger las inquietudes, ideales y prospectivas de la mayoría, y otra es la de imponer una particular forma de concebir el mundo y su destino.
Las dictaduras descalifican a su pueblo rechazando la capacidad de pensar por sí mismos y se atribuyen el "derecho" de pensar por ti.
Este fenómeno de "echarse el mundo a cuestas" es una tentación de las personas ambiciosas, pagadas de sí mismas y que guardan un concepto alto de su persona. Ven al resto de la gente como unos parvulitos incapaces de tomar decisiones y se sienten destinados por la Providencia para tomar el derrotero de las mayorías.
Las consecuencias de esta actitud es la de entregar un cheque en blanco para que te despojen de tu herencia política, económica y cultural, originando el Frankenstein que será el dictador de mañana.
La técnica es la de definir las carencias sociales y luego, en el discurso, prometer, prometer y prometer programas sociales o acciones que nunca tendrán lugar.
El poder es una manzana muy apetitosa y siempre se corre la tentación de quererla sólo para ti. Los tiburones globales acechan desde lo profundo y cuando alguien logra poseer el poder, brincan para engullirte con melosas melodías, préstamos para hipotecar a tu pueblo e ideologías que sólo interesan a estos "protectores" para desarrollar las intenciones del Cabal.
La exclamación de Madame Roland, antes de ser ejecutada en la guillotina en nombre de la "Revolución", durante la época del Terror en la Francia del siglo XVIII, dijo: "Libertad, cuántos crímenes se cometen en su nombre".
Esta reflexión pronunciada por alguien que va a morir iluminó su inteligencia para declarar esta tremenda aseveración. Y así ha sido siempre que hay una "Revolución" para borrar el "antiguo régimen". Siempre habrá víctimas, que es el precio de entregar a otros tu libertad y que se convierte en tu propio verdugo.
Este antecedente debe de servir de experiencia para el pueblo mexicano, que ve venir la debacle con la guillotina de la 4ª. Transformación para cercenar nuestra libertad, ilusiones y esperanzas, para entregarlas a un poder más grande que ella.
SAPIENTIA LDI
EDITORIAL